La Meca, ubicada en la actual Arabia Saudita, era en aquel entonces un importante centro comercial y religioso. La ciudad albergaba la Kaaba, un santuario que atraía a numerosos peregrinos y que hoy en día es considerado el lugar más sagrado del Islam. En este contexto, Mahoma comenzó a predicar la existencia de un único Dios, Alá, y la necesidad de someterse a su voluntad, lo que se conoce como "Islam", que significa "sumisión".
En el mapa, fácilmente podemos ubicar La Meca. Ahí precisamente es el origen de esta religión.
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